jueves, 23 de julio de 2015

SÚPLICA A UN MARIDO SIN IMAGINACIÓN

Tu voz desescombra un fangoso 
lodazal De tópicos
y levanta un muro
de Babas 
(entre tú y yo)
Jugos
que dices extraer de mi cuerpo
en un ritual de unciones
repetidas hasta El desmoronamiento 
de mi paciencia

Tu voz desescombra palabras 
que desde el albor de los albores
repiten Los machos 
sin posibilidad de hacer metáfora
(por incapacidad o desinterés)

y tu voz construye un tugurio
De escombros
que bautizas
como: Tu deseo hacia mí

y es tan fangoso el lodazal
De los tópicos 
en los que tu voz se derrocha
(como irritante
a los oídos descalzos de mi femineidad)

que ruego a tu verborrea 
de vendedor 
de hielo en la Antártida:

¡DeSemPachaMe!

Invéntate un hombre, o
deja sitio en mi cama 
para que sueñe con 
Varou/Yanis