unas experiencias empujan
a las otras
Detalles como trepar, observar con los ojos
fijos
desperezarse o bostezar
despliegan los instantes del cuerpo
en un baile
Ella existe
sumergida en la primera vez
Ella huele y lame
con un entusiasmo febril
Ella,
y su forma particular de emoción
La paciencia
prueba irrefutable de un transitar
que se desliza como un carro
enganchado a los misterios
Es la costumbre
la costumbre
entre los miembros de la casa
estirar los dedos y la espalda
Ella y yo nos estiramos hacia la ventana
mirador de los hechos:
Afuera se parlotea, se cacarea, se chismorrea, se degrada, y más, y más.
Dentro, al cobijo de la leña que arde,
los ojos exaltan el deseo
que retorna en la humedad de la lengua
Sobre la alfombra los andares
rememoran el goce de levitar
aunque a veces corramos
a causa del júbilo.
Así conjugamos, ella y yo,
quizás solo yo,
el verbo Estar:
En el despliegue de esta luz hecha de miradas
Bebemos y comemos por separado.
A veces llueve
A veces vienen los amigos
Poco más.
¿Lo habremos hecho bien?
pregunta antes del olvido
ya transitados, los momentos
No hay comentarios:
Publicar un comentario